martes, 22 de marzo de 2011

Cartaratas Victoria

Las cataratas Victoria, son un salto de agua del río Zambeze situadas en la frontera de Zambia y Zimbabue. Están ubicadas en el distrito de Livingstone, en la Provincia del Sur, de Zambia y en el distrito de Hwange, en la región de Mashonalandia Occidental, de Zimbabue. Sobre ellas está el puente de las Cataratas Victoria, un antiguo arco de acero terminado en 1905.

Miden aproximadamente 1,7 km de ancho y 108 m de alto. Se consideran un espectáculo extraordinario debido al estrecho y raro abismo en las que el agua cae. De tal forma que se puede ver la caída a simple vista.

David Livingstone, el explorador escocés, visitó la cascada en 1855 y las bautizó con el nombre de la reina Victoria, aunque son conocidas localmente como Mosi-oa-Tunya, el humo que truena. La cascada forma parte de dos parques nacionales, Parque Nacional de Mosi-oa-Tunya en Zambia y el Parque Nacional de las Cataratas Victoria en Zimbabwe, y son una de las mayores atracciones turísticas del África austral. Han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en el año 1989. Abarcando el área protegida una extensión de 8.780 ha.

Desde 2010, las Cataratas Victoria están integradas dentro del Área de Conservación Kavango-Zambeze.

Fuente del Rio

as caídas de agua pueden tener diversos orígenes y se forman con mayor frecuencia cuando un río es joven,[1] momento en que el cauce es a menudo estrecho y profundo. En la mayor parte de los casos, se deben a la desigual resistencia que oponen las rocas a las corrientes de agua. Cuando un río desgasta profundamente su lecho y encuentra resistencia en una masa rocosa, el ahondamiento se produce más lentamente.[1] [2] De este modo, el nivel del obstáculo constituirá, temporalmente, el nivel de base, ya que que el obstáculo por sí mismo establecerá el perfil longitudinal del río aguas arriba. Pero río abajo, más allá de esta masa rocosa que resiste, el ahondamiento prosigue más rápido, y formará su fuerte declive, o una bajada vertical, que interrumpirá el curso del río y será la causa determinante de la caída. A medida que el curso de agua aumenta su velocidad en el borde de la caída, logra arrancar material del lecho del río. Los remolinos creados en la turbulencia, así como la arena y piedras transportadas por la corriente de agua, aumentan la capacidad de erosión.[1]



Las aguas que se precipitan desde lo alto de una cascada no adquieren gran velocidad durante su caída debido a la resistencia del aire y a que se dividen en numerosos chorros o saltos. Su base queda sujeta a la erosión cuando está constituida por rocas blandas bajo una capa de rocas más resistentes. Siendo los estratos blandos disgregables, se producen desmoronamientos de los estratos superiores al quedar privados de soporte. Es así como las cascadas retroceden y se desplazan en dirección a la fuente del río —como fue el caso de las cataratas del Niágara entre 1842 y 1927—.

Cataratas del Salto del Ángel

Una caída o salto de agua es un lugar donde el agua fluye rápidamente perdiendo elevación mientras discurre por una región con fuerte desnivel o por un acantilado. Las caídas de agua se consideran uno de los fenómenos más bellos de la naturaleza.[1] Algunas caídas de agua se utilizan para generar energía hidroeléctrica.


En español se emplean varios términos para designar este accidente, como caída, salto, cascada, catarata, torrente, rápido o chorro, sin que estén claramente definidos ni científicamente determinados. Se emplea el término cascada para designar la caída desde cierta altura de un río u otra corriente por un brusco desnivel del cauce y se habla de catarata cuando se trata de una cascada muy grande o caudalosa. En cualquier caso no siempre es fácil la correspondencia entre el nombre del accidente geográfico y el descriptor y muchas cascadas son en realidad cataratas, agravado por que es difícil saber cuando se emplea el descriptor en singular y cuando en plural (como por ejemplo, «catarata de Paulo Afonso» vs. «cataratas del Niágara») y cuando se hace uso del determinativo «de» o «del» («salto Angel» vs «salto de Tungela»). También se emplean voces de otros idiomas, como cachoeira, chute o waterfalls

Vídeos sobre las cataratas


Las cataratas son peligrosas sobre todo si te empujan. hsadlkhasdklhasdlkhjasdl hjsadkhjklasdhklasdhjasdjasdjaslkjhaslk haskhashasjulasjLAKJASL lhjaLHJSKLJASLKL B JASKLjaslkjaKLJALKa ASJLSKAJLKAjhlasjasl hhhhhh,











jueves, 17 de marzo de 2011

CATARATAS DEL NIÁGARA


Una caída o salto de agua es un lugar donde el agua fluye rápidamente perdiendo elevación mientras discurre por una región con fuerte desnivel o por un acantilado. Las caídas de agua se consideran uno de los fenómenos más bellos de la naturaleza.[1] Algunas caídas de agua se utilizan para generar energía hidroeléctrica.

En español se emplean varios términos para designar este accidente, como caída, salto, cascada, catarata, torrente, rápido o chorro, sin que estén claramente definidos ni científicamente determinados. Se emplea el término cascada para designar la caída desde cierta altura de un río u otra corriente por un brusco desnivel del cauce y se habla de catarata cuando se trata de una cascada muy grande o caudalosa. En cualquier caso no siempre es fácil la correspondencia entre el nombre del accidente geográfico y el descriptor y muchas cascadas son en realidad cataratas, agravado por que es difícil saber cuando se emplea el descriptor en singular y cuando en plural (como por ejemplo, «catarata de Paulo Afonso» vs. «cataratas del Niágara») y cuando se hace uso del determinativo «de» o «del» («salto Angel» vs «salto de Tungela»). También se emplean voces de otros idiomas, como cachoeira, chute o waterfalls.


Por ejemplo cataratas de iguazu.


La Geología es la ciencia que estudia las formaciones del terreno y el relieve.